Salvia era la herba sacra" de los romanos, para quienes era la hierba buena para todo. Las hojas de salvia son ricas en flavonoides y en un aceite esencial que le proporciona un aroma perfumado. Actúa como colerético (incrementa la secreción biliar), antiespasmódico y relajante en los músculos del estómago y el intestino. El aceite esencial además es antiséptico. Gracias a todas estas propiedades muestra una gran efectividad en los trastornos digestivos (vientre hinchado, fermentaciones intestinales, eructos, espasmos gástricos e intestinales, digestión lenta y difícil). Asimismo y sobre todo, gracias a la presencia de fitoestrógenos es la planta de las mujeres, aligera los dolores típicamente femeninas. En caso de reglas irregulares, dolorosas o poco abundantes, ayuda a ocasionar y regular la menstruación, de mismo modo disminuir considerablemente los trastornos de la menopausia, especialmente los sofocos. El aceite esencial actúa sobre las glándulas sudoríparas y debilita la transpiración excesiva que aparece especialmente durante la menopausia."